Con las medidas de confinamiento de toda la población la mayoría de negocios han visto cerradas sus puertas. Entre ellos todos los centros de salud y belleza, para muchos una gran pérdida ya que no se pueden realizar sus tratamientos corporales ni faciales como querían.
Pero estar en casa también les da la oportunidad de invertir tiempo en sí mismos, hacer dieta, ejercicios que les ayuden a tonificar, e incluso empezar a investigar y descubrir que gracias a productos caseros podemos aportar nuestro granito de arena en mejorar nuestra piel, el rostro o el aspecto de nuestro cabello.
Desde nuestro centro de estetica Rivas Vaciamadrid hemos pensado en darte un par de trucos y mascarillas caseras con las que te irás poniendo a punto para la vuelta de la rutina y la llegada del verano. Son productos muy fáciles de encontrar y elaborar, y que cualquiera se puede hacer en casa sin esfuerzo.
Ahora ya no tendrás excusa para verte resplandeciente, con la piel tersa y un cabello brillante.
Empecemos cuidando nuestro cuerpo
¿Te has quedado sin crema para el cuerpo o sin gel exfoliante?, ¿o sencillamente eres de los que se han aficionado a los productos naturales?, sea cual sea el caso este tratamiento es para ti.
Si quieres eliminar todas esas células muertas, preparar la piel para los rayos de sol y que tu bronceado luzca uniforme y tener la piel tan suave como la de un bebé toma nota:
Vas a necesitar, una taza de azúcar, media taza de azúcar moreno, dos cucharadas de aceite de coco ( si no lo tienes o no lo encuentras también puedes usar aceite de oliva), una cucharada de miel, un par de gotas del jugo de un limón y una cucharada de aceite esencial (normalmente los que disfrutamos de la repostería solemos tener de vainilla).
Una vez tengamos todos los ingredientes reunidos los mezclamos bien en un bol y los aplicamos gracias a un algodón o una esponja sobre nuestra piel con movimientos circulares. Así con el suave masaje nuestra crema casera de lifting irá arrastrando las células muertas de nuestra piel e hidratándola a la vez. Una vez terminado nos duchamos como siempre.
Sigamos por el tratamiento para nuestro pelo
Cada vez que nos lavamos con los productos que encontramos en el mercado sin querer vamos dejando residuos en él, lo que provoca que nuestro pelo se vea con menos fuerza y más apagado.
Si queremos hacer un tratamiento detox para nuestro cabello con aplicar esta mascarilla cada quince días tendremos un pelo libre de impurezas y brillante: Usaremos dos cucharadas colmadas de bicarbonato de soda y un vaso o dos de agua dependiendo del largo de nuestro pelo, mezclamos hasta que quede una masa uniforme.
Una vez hecha, masajeamos nuestro pelo con la cabeza hacia abajo aplicando todo el producto de raíz a puntas y dejamos reposar 15 minutos. Después lavamos y enjuagamos con normalidad.
Una mascarilla casera muy efectiva para todos aquellos que tienen el pelo frágil, sin fuerza, castigado por los tintes, las planchas, secadores etc. Es añadir en un cazo o un bol dos cucharadas de aceite de oliva (aumentaremos cantidad cuanto más largo tenemos el pelo), dos de miel, una yema de huevo y si tenemos vinagre de manzana.
Con la mezcla frotamos de puntas a raíz, recogemos el pelo en un moño o coleta y lo cubrimos todo con papel film para aumentar la temperatura. Dejamos reposar la mascarilla al menos una hora, cuanto más la aguantemos en nuestro pelo más se hidratará este y procedemos a lavarnos la cabeza como siempre.
Veremos como nuestro cabello además de más sano y fuerte recobra el brillo y la flexibilidad que tenía antes, y así crece más rápido.
Tendremos que finalizar cuidando nuestras manos y pies
Se trata de las zonas que más olvidamos cuando hacemos tratamientos corporales, pero es muy importante tenerlas bonitas y cuidadas. para las manos bastará con mezclar 100 mililitros de aceite de oliva, unas gotas de limón y aceite de ricino si tenemos. Retomaremos nuestras manos en la mezcla o las frotaremos con ella y nos pondremos unos guantes durante 15 minutos, y manos perfectas.
En cuanto a los pies bastará con una taza de sal de Epsom, un manojo de pétalos de rosa y de menta o hierbabuena, rodajas de limón (aprovecharemos el limón sobrante de los anteriores tratamientos) y agua tibia. Dejamos reposar los pies en el agua durante 20 minutos y secamos bien después.